Día del padre. ¿Día del que?

(Texto escrito en mi fotolog el día del padre del año pasado. Este ni siquiera tenía ganas de escribirte)

Ahh, me fije en el diccionario y el dice que padre es la persona o animal que tiene hijos. Entonces si, yo tengo uno, más animal que persona, por supuesto.
18 años tengo, y en estos 18 años no pude vivir un solo momento feliz con el, les juro que ni uno solo. Ahh si, me acuerdo que fui feliz cuando me enseño a andar en bicicleta, y veo muchas fotos de cuando yo era chica y estaba sonriendo, supongo que ahí también era feliz y no fingía esas sonrisas. El problema se dio después, cuando yo fui más grande y pude ver que clase de personas es. Con el parezco una coleccionista de momentos infelices.
Mama, gracias a Dios y al cielo (mentira, gracias a ella) pudo dejar de torturarse con el en el momento en que decidió separarse, mi hermana si lo ve 2 veces al mes es mucho (porque esta estudiando en otra ciudad), pero… ¿y yo?, yo me lo tengo que fumar 2 horas por días, 5 veces a la semana. Yo soy la que tolero su indiferencia, es a mi a quien ignora, es a mi a quien maltrata, es a mi a quien le ordena. Y yo, obvio, con mi cartel de Gran Pelotuda que siempre en mi puta vida me trague todo, y nunca, nunca, nunca le conteste. Entonces lo único que puedo hacer después de haberme tragado tanta basura es detestarlo, y desear no tener que verlo nunca más, y es literal.
¡Si alguien pudiera saber, si alguien pudiera entender que el es el mayor de mis problemas y causante de tantos otros”, pero como siempre yo elijo callar.
Como detesto que digan “aii sos igual a tu papa”, ¿igual a ese monstruo? JAMAS. Yo tengo carácter de mierda, pero no soy una mierda. El tiene carácter de mierda y es una mierda.
Bueno, en fin, hable demasiado de una persona que no lo merece, solo resta decir que soy rencorosa y orgullosa, pero jamás tanto como el…entonces en verdad deseo que algún día de su miserable vida pueda encontrar la paz con el mismo y que encuentre la forma de reconciliarse con la vida… y sobre todo que se arrepienta del mal que hizo. Mientras tanto… ¿a mi que me importa si es el día del padre o el día del pajarito?

Solita.

Tantas y tanas veces escribi sobre mi soledad que ya me siento pateticamente repetitiva. Pero lamentablemente esa soledad es algo así como un síndrome recurrente en mi rutina.

Una vez  leí la frase mas cierta que se puede haber escrito: "Estar solo es estar rodeado de gente y no tener a nadie que piense en vos". Eso mismo es lo que siento, eso mismo es lo que me pasa a mi. ¿De que me sirve tener mas de mil amigos en facebook si nadie responde a los gritos que se esconden detras de mis estados? ¿De que me sirve estar en una grupo tan grande de amigas si no hay ninguna que pueda escucharme? ¿De que me sirve haber sido tan popular en las twitcam si ahora que deje de hacerlas nadie se acuerda de mi?... No entiendo, ¿se puede estar tan sola en esta vida tan llena vacía?.

Se que si muchas personas allegadas a mi leerían esto me dirían lo que ya escuche y leí mil veces "Miranda, no estas sola", y lamento no poder reconocer su apoyo, pero sinceramente... no puedo verlo. No puedo ver a las personas a mi lado, no las siento. No siento su presencia, solo siento vacío... soledad. Quizas sea como una amiga me dijo un día "vos siempre te quejas que te abandonan, que te olvidan, que te dejan sola, pero... ¿vos estas siempre en todo y para todos?"; es verdad... quizás yo no este presente en los demás, pero sinceramente no creo que exista en este momento un ser que me necesite. Nadie depende de mi como yo dependo de ellos.
Es triste, la verdad es que es muy triste estar sentirse así de sola. Pero mas triste es no poder encontrar el antídoto para ese mal.

Mírame

Mirame, date vuelta y mirame, date vuelta y volve por favor. 
Cuando queres que alguien te mire no importa ninguna otra mirada, vos queres esa mirada y ninguna más.
Pedimos a gritos desesperadamente que abran sus ojos y nos miren, que nos vean, que vean nuestro dolor y nos comprendan.
Hacemos enormes esfuerzos para no necesitar de nadie, para no necesitar de una mirada para existir. Pero somos esclavos de esa mirada, la necesitamos, como al aire. Hacemos cualquier cosa por atraer esa mirada, intentamos ponernos en el campo visual del otro, quisiéramos tener un reflector que nos ilumine, quisiéramos brillar para ser mirados.
Lo curioso es que los ojos que más nos obsesionan son los que no nos pueden mirar. Pero la mejor mirada no es la que se nos niega, sino esa mirada que no vemos, la que ignoramos distraídamente.
Esa mirada inesperada, fuera de todo calculo, esa mirada que nos ve cuando no nos sentimos mirados y por lo tanto nos mostramos mejor. Una mirada capaz de atravesar la máscara y ver lo que hay detrás.
Es imposible que nos mire a una mirada vacía, vaciada. Pero lo queramos o no somos esclavos de esa mirada porque todos somos luces apagadas que solo se encienden cuando alguien nos mira.

... y se fueron todas al entierro.